Yo

EL MAL CHUPAR

lunes, 4 de junio de 2012

¡HORROR!  Los mayas tenían razón, todo calza, el mundo se acaba ahora.  Más temprano que tarde tenía que pasar algo así.  Mis talentos en la cama morirían o peor aún, yo me daría cuenta que en realidad soy un fiasco en la cama.

Usted mi querido lector estará leyendo estas líneas con horror, espanto, o probablemente esté levantando los brazos en señal de desesperación ante tan terribles hechos, pero tarde o temprano tenemos que despertar del amargo sueño de la inexperticia (¿existe esa palabra?)

Yo que he pasado tantos años engañada por mis amantes pensando que mi punto fuerte era la aplicación lingual del miembro (suena super siútico, pero usted sabe que esto lo lee mucha gente, no puedo poner que la chupo rico)

Menos mal que mi asado uruguayo favorito me hizo caer en cuenta de mi error.  Como es tan seco en lo que a sexo se refiere, me abrió los ojos (bueno, no solo los ojos, pero el resto se los cuento después) ¡¡¡ME DIJO QUE LO CHUPO MAL!!! Yo en el instante me sentí pésimo.  Quise pedir perdón a todas las mujeres chilenas por dejar tan mal a la raza, siendo la peor exponente de las conferencias de prensa en mi país.

En ese concierto había decenas de mujeres y justo yo tenía que ser la que lo chupaba mal.  Pero ahí solo comenzaban mis problemas, por que caí en cuenta de dos hechos.  Primero: ¿era yo la que lo chupaba mal solamente, o todas las mujeres en Chile lo chupaban mal? Esto a raíz que yo llevaba muchos años y tipos chupándola, jurando al fabricante que lo hacía a las mil maravillas  porque mis amantes me decían que lo hacía rico.  Entonces quién está mal acá, yo o ¿mis amantes se conformaban con poco y malo?

Cuando uno lleva años pensando que hace algo bien y alguien le dice que lo hace como el horto, empieza una especie de sicosis por saber quién está mal.  Pero como yo soy una mujer de acción más que de preocupación, ante el problema hay que encontrar solución; y como la práctica hace al maestro, yo me puse a practicar.

Todos mis amantes sorprendidos con mi relato, generosamente se ofrecieron de conejillos de indias en mi experimento o más bien en mi capacitación oral (¡era que no!) Así que yo de lo más aplicadita (además de traumada que estaba), me mandé tremendas conferencias, para cuando el maestro me tomara exámen yo aprobara con honores; porque si hay algo que no soporto es no ser la mejor en todo y esto requería de mi mayor esfuerzo.

Y le dí, le dí, le dí.  Mis chicos me ayudaron en lo que más pudieron dando indicaciones, comentarios o su empujadita de cabeza durante la clase.  Yo hice mi mejor esfuerzo y ellos al parecer lo agradecieron.

Llegó el día de la prueba de fuego.  Mi amigo abuelo, que a estas alturas era el viejo cul… que me dijo que la chupaba mal; vino a visitarme.  Obvio que iba a terminar dándome como tarro, pero antes de cualquier cosa le dije lo traumante que fueron las semanas posteriores a nuestro encuentro y mala chupada.  El desgraciado soltó la carcajada.  Me Preguntó si en realidad me había creído lo de la mala chupada, que era broma porque se lo había chupado poco.  Sólo por eso no se lo chupé más, ¡qué se cree este viejo! Venir a traumarme después de años de abnegada dedicación en el campo del sexo oral.

Al menos mis amantes fueron los más beneficiados con el trauma.  Pero obvio que como todo en la vida obtuve una lección de esto; todo debe perfeccionarse y cultivarse. El sexo como todas las artes requiere de variedad, imaginación, inteligencia y práctica.  Lástima que el viejito no pudo probar mi nuevo aprendizaje; solo espero que en su próxima visita me deje un trauma nuevo…digo, por el bien de mis amantes chilenos.

2 comentarios:

  1. Real Fenix dijo...:

    jajaja muy buena historia...de verdad hay muchas mujeres que lo hacen bien me e tocado con una que lo hizo pésimo por eso mejor se lo quite...jaja con el tiempo se aprende y practicando y recibiendo buenos concejos se puede llegar a la maestría en eso...saludos

Publicar un comentario