!!!Mis amados lectores¡¡¡ les pido un millón chorrocientas disculpas por no escribir antes, pero para variar la tecnología me jugó una mala pasada.
Pero a lo que vinimos. La tertulia de la semana o en este caso la elección. Porque no todo es color de rosa en el mundo de una soltera; a veces hay que ponerse seria para realizar una evaluación del entorno.
Me imagino que usted esta con su mejor cara de pregunta diciendo ¡que carajos se fumó esta mina! o ¡creo que me metí a la página de los Legionarios de Cristo!!!”, pero nooooooooooooo; está en mis sábanas leyendo a su amante favorita.
Me explico, hace poco terminé una relación, pero como soy una mujer con “mis necesidades” prefiero optar por aquella antigua y sana costumbre yanqui del “amigo de transición” que es un hombre que brinda todos sus encantos al servicio de la sexualidad femenina mientras encuentra un macho que le guste y le llene su corazoncito...entre otras cosas.
Estoy en esa encrucijada de la vida…porque para variar, me gustan las cosas en abundancia, tengo 4 especímenes a mi haber y como esta cuestión no es al lote hay que quedarse con uno (en realidad me los comería a todos, me da lo mismo, pero quiero parecer cartucha un rato, es más entretenido para el blog… ¡todo sea por mis hermosos lectores!)
Pasemos a los candidatos…
1.- El desarmador: Amigo hace años, lo encontré en la sección de amigos perdidos del “usted sabe book”. Tiene grandes posibilidades respecto del sexo, el cabro la lleva. Redondito y todo (ya saben, me gusta la abundancia) mi compadre es aplicadito en la cama, hasta el punto que casi me desarma completa; de ahí su apodo. Por el momento no tiene nada en contra, salvo que me aplasta…literalmente. Tal vez el único pero sería eso…podría morir de asfixia!
2.- El cuasi franchute: Como todo en la vida es por los amigos, el casi francés se ofreció amablemente a cumplir los menesteres que mi ex dimitió. Este cabro lleva años sin ver la luz, es como un hermano para mí, pero como no lo es, se pegó la avivada que yo era mina así que se quiere salvar conmigo…en una de esas nos llega la redención a los dos. ¡Todo sea por la amistad!
3.-El aparecido: Este no es amigo ni nada por el estilo, pero ¡le tengo unas ganas! El punto en contra de este candidato, es menor y amigo del amigo del amigo de un amigo mío (en verdad no es tan enredado, solo le doy color) así que es casi como volver al mismo capítulo que con mi ex, porque lo conocí de la misma manera. O sea tropezar de nuevo con la misma piedra… ¿o no? Lo bueno de estos cabros jóvenes es que están tan ganosos que te dan como caja, por eso le eche el ojo y espero que me eche algo más que una mano (je je je…recuérdelo, soy una perversilla)
4.-El desesperado: Otro amigo generoso. No me lo esperaba de uno de mis más grandes amigos, el otro día se me tiró encima sin mediar provocación. El pobrecito hace rato que tampoco le pone en conocimiento a nadie de sus habilidades y supongo que yo soy la víctima más cercana. Pero, es muy amigo de mi ex, con decir que estaba en su casa, sonó la puerta… y casi me dio un infarto pensando que podía ser el susodicho. O sea, mejor evitar la sangre; además lo veo más como hermano que otra cosa, aunque podría parecer cura de tanta cuestión que le he confesado.
Como en alguna parte de mi soy analítica, estoy tomando mi tiempo haciendo el casting a cada participante. No hay que cerrarse a las posibilidades, pero tampoco abuse de los amantes, mire que me ha pasado que los cabros se engolosinan o les da por enamorarse y todos sabemos que eso es más que peligroso cuando solo se busca pasarlo bien. Lo ideal es rayar la cancha antes de meterse en camas ajenas y luego disfrutar, porque como dicen por ahí “mientras aparece el correcto, disfrutemos al incorrecto”
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